"«Amor verdadero y grandes aventuras», yo creí en eso en cierta ocasión. Pensé que mi vida iba a seguir esos derroteros. Rogaba porque fuera así. Está claro que no lo fue, pero no creo que todavía existan grandes aventuras. Hoy en día no hay nadie que desenvaine la espada y grite: «Hola, me llamo Íñigo Montoya. ¡Tú mataste a mi padre; disponte a morir!»
Y del amor verdadero también os podéis olvidar. Yo ya no sé si hay algo que quiera de verdad."
La princesa prometida.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Azul.

Azul, te sigo echando de menos. Y sé que no hablo de ti y que no lloro, pero te echo de menos. De verdad de la buena. Te lo prometo. Y me acuerdo todos los días de ti. Y sigo odiando el 17. Y sigo mirando al cielo todos los días. Y no creo en Dios. Ni en una segunda vida. La vida es esto y fin. Pero sé que estás por ahí, no sé dónde... Pero estás. Y eso es suficiente. Y te quiero. Te quiero mucho. De verdad que te quiero. Voy a tener ochenta años y seguiré queriéndote.

No hay comentarios:

Publicar un comentario